16/05/2024
09:25 PM

¿Vivieron Los Mayas en el valle de Sula? Esto dicen los expertos

¿Existen evidencias antropológicas que respalden la teoría de que los mayas también habitaron en el valle de Sula? Esto dice un estudio

San Pedro Sula

Siempre que hablamos de la cultura maya en nuestro país la asociamos con las Ruinas de Copán, y con la construcción de otras varias ciudades a lo largo de la zona occidental del país.

La mayoría de la presencia de esta cultura en Honduras se localizan en los departamentos de Copán, Ocotepeque y Santa Bárbara... ¿Pero y si también estuvieron en otra parte de Honduras.

Mitos y leyendas que guardan las calles de San Pedro Sula

Una interrogante de la arqueología del valle de Sula es si los mayas existían en el valle y ¿si los lugares y artefactos arqueológicos son de origen maya? La evidencia actual no es muy concluyente en cuanto a la ocupación de los mayas prehistóricos en el valle de Sula.

Los Mayas en el valle de Sula

De acuerdo al estudio de investigación: “Los pueblos del clásico tardío en el Valle de Sula”, que está disponibles en el sitio web del Instituto Hondureño de Antropología e Historia, si se tienen proposiciones operacionales sobre la composición étnica del valle de Sula, las cuales se están considerando.

El informe, presenta algunas de las ideas vigentes respecto a los habitantes prehistóricos del Valle de Sula .a fines del período clásico (A. D. 550-950).

En tiempos prehistóricos e históricos, el Valle de Sula era lo que se entendía como la frontera meridional de los mayas y Mesoamérica en general. Las evidencias lingüísticas de los documentos españoles del siglo XVI muestran que el Valle de Sula era el punto de reunión de los mayas, con intensas tradiciones mesoamericanas y los jicaques, cuya cultura era menos compleja que la de los mesoamericanos y típica de Centroamérica.

Las fuentes de información muestran que el río Ulúa era una frontera entre estos dos diferentes grupos étnicos. Los mayas vivían a unlado oeste del río: los que hablaban el “chol” estaban situados a lo largo de la costa y los que hablaban el “chortí” ocupaban las áreas interiores. Los jicaques vivían al lado este del río.

Además de estos dos grupos, se encontraban las colonias nahuas o aztecas consistentes en puertos comerciales. Al sur del Valle de Sula, las fuentes históricas registran la presencia de lencas en el Lago de Yojoa y el Valle de Comayagua.

Su infancia en fotos: los juegos tradicionales que marcaron la niñez hondureña

Puede deducirse entonces que en los años 1500 en el valle de Sula residían por lo menos dos grupos diferentes, los mayas y jicaques. Los lencas podrían haber estado en la frontera meridional o al final del valle. Etnicamente, el valle de Sula era diverso; era una zona fronteriza o frontera entre dos diferentes razas, con diferentes tradiciones culturales.

Hipótesis sobre los Mayas en el valle de Sula

Hipótesis

En 1947, John M. Longyear expuso una idea: el valle de Sula estaba habitado por personas que no eran mayas sino lencas. Longyear declaró que la arqueología del Valle de Sula carecía de características propias y se asumen como típicas las de la cultura maya.

Declaró que no existen estelas talladas elaboradas y elegantemente como las que se encuentran en las principales parcelas mayas, pero sí había columnas sin tallar y figuras talladas toscamente. Los mayas pintaban jeroglíficos en bandas y éstas se colocaban alrededor de vasijas.

En el valle de Sula se encuentran vasijas pintadas y talladas con bandas, pero los motivos de estas bandas no son símbolos escritos con jeroglíficos sino símbolos abstractos repetidos. Longyear concluyó que la alfarería influía, pero que probablemente no fueron los mayas los que los producían.

Pero ciertos elementos del inventario de material cultural dan a entender que existía una fuerte relación entre la cultura de los clásicos en el Valle de Sula y la de la región maya. Realmente, algunos investigadores han argumentado que el área puede ser interpretada como una variante regional de la cultura maya.

George Kubler (1962), un historiador del arte que trabaja con materiales precolombinos, y Gordon Willey (1968) sugirieron que el estilo de la pintura y la organización de la pintura en cerámica de la zona fronteriza son meramente una variante del estilo maya y no algo extranjero.

La hipótesis del “Los pueblos del clásico tardío en el valle de Sula”, es que la población del valle era étnicamente diversa y eran los mismos grupos que ocuparon el valle en el siglo XVI y fueron distribuidos similarmente. Por lo tanto, proponen en su proyecto que el lado oeste del valle de Sula era una región maya y el este lo ocupaban los jicaques. El extremo meridional del valle y más allá pudo haber sido habitado por los lencas.

Fuente: Proyecto Arqueológico Sula, IHAH