En esta isla era un secreto a voces lo que hacía la red criminal que el Ministerio Público desarticuló este jueves, dedicada a la pornografía infantil, trata de personas y tráfico de drogas y armas.
Compuesta por jueces, policías, empresarios hondureños y extranjeros, esta misma estructura está ligada a la desaparición de la joven hondureña Angie Peña, según la Fiscalía.
Desde horas tempranas de ayer, la Unidad contra la Trata de Personas de la Fiscalía y la Dirección Policial de Investigación (DPI) allanaron varios negocios y residencias en la isla de Roatán, donde capturaron a Harold Green, William James Murdock y Gustavo Trejo, acusados de pornografía infantil, trata de personas y otros delitos conexos contra jóvenes y menores de edad. Otro extranjero ya había salido del país.
Las investigaciones también involucran al titular y secretario del Juzgado de Paz de Roatán, así como a policías en la isla, quienes facilitaban, según la Fiscalía, procesos ficticios y falsificación de documentos a los detenidos para amedrentar a otras personas.
Todos operaron impunemente desde 2019, aseguró el Ministerio Público. Estas acciones eran movidas con los dineros que obtenían del delito de trata de personas. La red se hacía llamar los “Delta Teams”, que también traficaban con drogas y armas prohibidas.
Caída
A los sospechosos se les seguía la pista luego de la captura en agosto de 2022 del norteamericano Gary Lee, relacionado con la desaparición de Angie Samantha Peña en enero de ese mismo año.
En las investigaciones, los fiscales encontraron evidencias de relaciones sexuales, “con imágenes repudiables de niñas indefensas”, indicó la hoja de prensa del MP.
Como parte de las operaciones se aseguraron los negocios The Dock Resort, Happy Harrys Hideaway, Ikigai e Ipanema, lugares, que según la Fiscalía, eran utilizados por estas personas para cometer sus abusos y otros delitos.
Los detenidos fueron remitidos a San Pedro Sula.
